jueves, 28 de julio de 2011

Aeternitas numismatics – un blog imperdible

Hace unas semanas escribía sobre el desarrollo de una verdadera blogósfera numismática en lengua española y mencionaba algunas de las bitácoras más interesantes. En el breve lapso de tiempo transcurrido, esa blogósfera ha seguido creciendo. Hoy quiero presentaros una nueva y brillante adición a la misma: Aeternitas numismatics. Esta página sólo tiene dos meses de existencia y cuenta con nada más que cinco entradas, pero cada una de ellas es un estudio extenso, profundo y detallado que el lector podrá disfrutar por largo tiempo. Cada texto está, además, acompañado de excelentes imágenes.

Su autor es historiador y novelista de vocación. No sorprenden, en consecuencia, la precisión y elegancia de sus textos. Su blog tiene un formato sencillo pero elegante que deja que su contenido hable por sí sólo.

Sus tres últimas entradas se han concentrado en la 1° tetrarquía profundizando todos los aspectos de su producción numismática en conexión con la historia política y militar del Imperio Romano. Desde aquí le deseo lo mejor y espero poder seguirlo leyendo por mucho tiempo.

martes, 26 de julio de 2011

Subastarán una de las monedas de oro más grandes del mundo antiguo (octodracma o Mnaieion de Arsinoe II)

La mayoría de los estados griegos de la Antigüedad no acuñaron muchas piezas de oro, y cuando lo hicieron, se trató generalmente de monedas pequeñas. Esta pieza (que será subastada próximamente por la casa Harlan J. Berk junto con otros tres ejemplares de la misma denominación) es la excepción. Acuñada en honor de Arsinoe II, hermana y esposa de Ptolomeo II, pesa 27,72 gramos y tiene un diámetro de aprox. 28 milímetros.

La denominación se llama mnaieion, es decir, moneda de una mina, y es equivalente a 100 dracmas de plata, o una mina de plata.

Esta moneda extraordinaria no fue, con seguridad, por su enorme valor, de uso popular o comercial, pero tenía una función simbólica y era un buen medio para atesorar riquezas. La moneda puede haber tenido también, por lo menos en parte, una función ceremonial relacionada con un festival en honor de la reina Arsinoe, que fue deificada en vida.

Hace unos tres años un tesoro de monedas de oro ptolomeaicas apareció en el mercado mundial de antigüedades, haciendo que los precios de monedas semejantes a ésta bajaran de precio, por lo que el valor estimado para la subasta es de “sólo” 12.000 dólares.

Aquí podéis ver el catálogo completo de la subasta 176 de Harlan J. Berk.

viernes, 22 de julio de 2011

¿Cuál decadracma era falso? La respuesta

En la primera entrada sobre las falsificaciones de Carl Wilhelm Becker planteaba el siguiente “desafío para expertos”, identificar cual de los dos decadracmas de Siracusa ilustrados en la foto era auténtico y cuál una falsificación de la mano de Becker. Muy pocos dieron una respuesta.
Para facilitar la identificación, tenéis aquí la imagen del anverso de otro decadracma de Siracusa. Como puede apreciarse claramente, una de las monedas ilustradas arriba presenta algunas diferencias de estilo demasiado notables como para ser atribuibles a una variante de la época, la de la izquierda. Si bien Becker logró captar el aspecto general de los originales, su Aretusa no es del todo convincente. Si observamos con atención, veremos que (dejando de lado otros detalles) sobre todo la línea de la frente y los arcos de sus ojos no tienen la pureza clásica de las auténticas. Lo mismo sucede con la boca, cuyos labios se encuentran algo hundidos.

miércoles, 20 de julio de 2011

Carl Wilhelm Becker – Uno de los más grandes falsificadores de monedas antiguas de la historia 2° parte

Áureo de Cómodo - Copia de Beck a la izquierda - original a la derecha

Os presento aquí la segunda parte de esta breve serie sobre este gran falsificador. Podéis encontrar aquí la primera.

Sus métodos de producción


Becker realizaba todo su trabajo en forma completamente manual. Es decir que no utilizaba medios mecánicos para transmitir el diseño de una moneda auténtica a un cuño. Estudiaba cuidadosamente el original y luego grababa el diseño completo a mano de la misma forma en que se trabajaba en la Antigüedad. Cuando no podía conseguir un original para tomar como modelo trabajaba a partir de copias hechas con moldes de yeso u otros métodos. Parece que en algunos casos específicos trabajó a partir de ilustraciones de las monedas, acuñando algunas piezas de menor calidad de lo habitual en su producción. También produjo, en un par de ocasiones, algunas piezas fantásticas sin modelo antiguo concreto.

Una vez producido el troquel, Becker acuñaba sus monedas con golpe de martillo al igual de lo que se hacía en la Antigüedad y sin recurrir al uso de las prensas mecánicas habituales en la producción monetaria de su época. El proceso era muy laborioso y Becker llevaba a cabo casi sin asistencia todo el trabajo que en las “oficinas” de las cecas antiguas desarrollaba todo un equipo de especialistas. Becker trabajaba con cospeles que le eran proveídos por casas de fundición. Los utilizaba en forma esférica para producir monedas de alto relieve como algunas piezas griegas y en forma de discos para monedas más planas. En algunos casos utilizaba monedas antiguas de escaso valor y las reacuñaba con los tipos de otras más valiosas.

Para “envejecer” sus monedas recién acuñadas, Becker utilizaba un procedimiento muy original. Las colocaba en un cajón de madera lleno de viruta de hierro y arrastraba el cajón con su carruaje en un paseo por el campo.

Una vez producidas sus monedas, Becker las comercializaba, con gran éxito, a través de una red de agentes y de contactos comerciales por toda Europa. En algunos casos se las vendía expresamente como copias modernas, pero la gran mayoría de las veces se las hacía pasar por auténticas. A lo largo de su carrera, Becker vendió sus monedas a coleccionistas de todo el continente e, incluso, a muchos de los museos más importantes, como el Museo Británico, que todavía posee piezas de Becker.

Cuños grabados por Becker a mano para producir monedas de Transilvania del siglo XVII

Un falsificador expuesto


Las falsificaciones de Becker fueron expuestas como tales por el gran numismático italiano Domenico Sestini (1750-1832), quien en su obra Sopra i Moderni Falsificatori di Medaglie Greche Antiche nei tre Metalli (1826) describió y reprodujo varias de sus monedas. Becker se defendió diciendo que él producía copias para que los coleccionistas de menores recursos pudieran completar sus colecciones. Lo cierto es que a pesar del éxito de sus monedas Becker nunca tuvo una situación financiera particularmente buena y que experimentó en sus últimos años serios problemas económicos.

Las monedas de Becker no son hoy peligrosas pues un análisis detallado revela fácilmente su condición, pero no ocurría lo mismo en su época, en la que la catalogación y el estudio científico de las acuñaciones antiguas se encontraban en sus inicios. Lo que hace todavía interesantes a sus falsificaciones es el talento genial de Becker como grabador, capaz de reproducir en muchos casos de manera genial el espíritu de las acuñaciones antiguas.

lunes, 18 de julio de 2011

Mi nuevo blog sobre monedas antiguas en inglés


Hace tiempo que tenía el proyecto de crear un blog de numismática en inglés. Si bien me considero un defensor del uso del español, también tengo gran admiración por la lengua inglesa. Movido por el deseo de mantenerme activo en la escritura en ese idioma y por el afán de ampliar el público de este blog también hacia aquellos que no comprenden el español, he creado una versión inglesa de Monedas Antiguas, Ancient Coins. En este nuevo blog publicaré regularmente traducciones de las mejores entradas de esta página y algunas cosas más. Si deseáis practicar vuestro inglés, no dejéis de visitarlo. Espero que os guste. Agradeceré todos vuestros comentarios, críticas y sugerencias para mejorarlo

viernes, 15 de julio de 2011

Visita virtual al gabinete numismático del Museo Bode



Entre enero y principios de febrero de este año tuve la suerte de poder realizar una breve estadía de investigación en el gabinete numismático de Berlín, como reflejaba entonces en algunas entradas de este blog. Ahora quiero compartir con vosotros este excelente video que transmite de manera muy clara lo que experimentan tanto el visitante del museo como el especialista que accede al análisis de la colección. Las imágenes nos muestran, entre otras cosas, como un investigador analiza un espectacular decadracma de Siracusa. El vídeo está en alemán con subtítulos en inglés.

Con más de 500.000 piezas, el Gabinete Numismático de Berlín posee una de las colecciones numismáticas más grandes del mundo que, junto con una excelente biblioteca, se encuentra a disposición de los investigadores que la visitan. El público que accede al museo puede contemplar, junto con grandes tesoros artísticos de la Antigüedad al mundo moderno una selección de monedas representativas de la colección.

miércoles, 13 de julio de 2011

Carl Wilhelm Becker – Uno de los más grandes falsificadores de monedas antiguas de la historia (1° parte)

En los últimos meses las falsificaciones han sido un tema frecuente en el mundo numismático. Algo fascina y a la vez repulsa en estas piezas producidas con el afán de pasar por algo que no son. Por un lado, admiramos el talento, casi siempre anónimo, que es capaz, en algunas ocasiones, de engañar incluso a reputados especialistas, a curadores de museos y a casas de subastas. Por el otro, por supuesto, todos tenemos temor de ser estafados y de la terrible desconfianza que el éxito de los falsificadores difunde en el ámbito del coleccionismo. 

En esta entrada quiero dejar un poco de lado ese temor y concentrarme en la fascinación para presentarles al personaje de uno de los más talentosos falsificadores de la historia, Carl Wilhelm Becker (1772-1830). Uno de los pocos imitadores modernos capaces de reproducir el estilo de los grabadores antiguos, como puede verse en el retrato de Póstumo de su autoría que encabeza esta página.

En esta primera parte veremos cómo llegó Becker a convertirse en falsificador y en una segunda, que publicaré próximamente, cómo producía sus monedas y el final de su carrera.

De comerciante a “artista”


Carl Wilhelm Becker nació en Speyer el 28 de junio de 1772. Su padre, Johann Wilhelm Becker, era dueño de un viñedo y de un negocio de vinos y mantenía un puesto de honor en la ciudad como Síndico. En su juventud, Carl mostró una temprana afición por el arte, pero su padre no le permitió seguir esa vocación y convertirse en escultor. Cuando Carl alcanzó la mayoría de edad, lo envió a trabajar con un comerciante de vinos en Burdeos. Aquí habría él comenzado a hacer dibujos de monedas antiguas y a fabricar cuños como pasatiempo. En mayo de 1795, cuando se casó con Maria Catherina Tremelius de Mannheim, ya estaba en el negocio como comerciante de vinos en Frankfurt. Desde 1798 hasta 1802 o 1803 la pareja se estableció en Mannheim para desempeñarse en el comercio de telas. Este proyecto fracasó en 1803. El talento artístico de Becker no se conjugaba bien con el mundo de los negocios.

Después de su fracaso comercial, Becker vivió, entre otros lugares, por un tiempo en Munich, donde en la Real Casa de Moneda obtuvo un completo entrenamiento en el arte de producir troqueles de acero grabado. Becker estaba decidido a dejar de lado el comercio y forjarse un destino en una profesión más artística.

Decadracmas de Siracusa - ¿Cuál es el original y cuál de Becker?

¿Cómo se inicia un falsificador? De estafado a estafador


Es probablemente durante este período de residencia en Munich en el que sucede un acontecimiento de crucial importancia para su carrera posterior. Un barón le vendió a Becker una moneda de oro del emperador Cómodo que resultó posteriormente ser falsa. Al quejarse Becker de la estafa, el barón le respondió fríamente que lo merecía por su ignorancia, por meterse en un terreno que no conocía. Indignado, Becker se decidió a estudiar todo lo necesario para dominar la numismática antigua. Pudo así producir sus propias monedas falsas y tener la satisfacción de venderle una de oro al barón que lo había engañado.

Su éxito lo llevó a continuar su producción y a comenzar a comercializar sus monedas como medio de vida. La imagen que encabeza esta sección ilustra la calidad de su trabajo. ¿Alguien puede decir cuál es el decadracma original y cuál es el de Becker?

Leer la segunda parte de esta entrada

domingo, 10 de julio de 2011

Un fondo de pantalla numismático


Un lector, Jorge, me envía por correo este hermoso "collage" de imágenes de monedas para usar como fondo de pantalla en Windows. Me gustó tanto que quise compartirlo con todos vosotros. Podemos ver aquí algunos de los múltiplos o medallones de oro del Bajo Imperio más bellos que se conservan, entre ellos, el de Majencio que fue subastado este año por más de 1.400.000 dólares. También algunos hermosos denarios imperiales, entre ellos, el de Tito con el célebre reverso del delfín y el ancla. ¡Espero que os guste tanto como a mí!

viernes, 8 de julio de 2011

Aprender sobre monedas antiguas en Internet: Los foros numismáticos


En la entrada pasada presentaba un libro introductorio al coleccionismo de monedas antiguas. El coleccionista de hoy no está, sin embargo, limitado a la bibliografía como vía de aprendizaje, todos conocemos las posibilidades que Internet ofrece en ese sentido. Una opción especialmente útil para el principiante son los foros numismáticos, pues permiten entrar en contacto con cientos de otros coleccionistas, conversar con ellos, realizarles preguntas e, incluso, comprar o intercambiar monedas. Del diálogo con coleccionistas experimentados es posible aprender muchas cosas que ningún libro puede enseñar.

Aun el coleccionista experimentado tiene mucho que ganar participando en foros. No hay mejor lugar para conocer la reputación de vendedores, realizar consultas bibliográficas especializadas, y mucho más. Pero creo que lo más importante es la posibilidad de compartir con otros que comparten la misma pasión. Es cierto que participar activamente en foros puede demandar mucho tiempo, pero entrar regularmente y simplemente leer lo que los usuarios están diciendo es una excelente forma de estar al tanto de todo lo que pasa en el ámbito del coleccionismo.

En esta entrada quiero presentar algunos foros con distintos perfiles que me parecen especialmente valiosos.


Es uno de los foros más activos en lengua española, con casi 4.000 usuarios registrados. Ese es uno de sus atractivos más importantes, porque permanentemente se inician nuevas discusiones y se difunden noticias. Si bien no es un foro especializado en la numismática antigua, cuenta con importantes secciones de esa temática donde participan desde coleccionistas expertos hasta principiantes.


Éste es un foro mucho más pequeño, con más de 1000 usuarios registrados y, como su nombre lo indica, mucho más especializado. El eje del mismo es la numismática romana, pero cuenta también con una sección sobre moneda ibérica y otra para el resto de la numismática antigua (griega, bizantina, etc.). Los participantes en el foro son en su mayoría coleccionistas experimentados. El nivel de la discusión es más elevado, pero el principiante puede encontrar aquí mucho material de lectura valioso e irse introduciendo de a poco en la discusión.


Éste es uno de los foros especializados más importantes del mundo. Sí, es en inglés, pero tiene también pequeños subforos en otros idiomas y, entre ellos, en español. Es decir que es un foro verdaderamente internacional con varios miles de usuarios, entre ellos, coleccionistas de todos los tipos y también comerciantes de monedas. Uno de los atractivos especiales de este foro para el principiante son las numerosas páginas introductorias que ofrece. Las mismas se encuentran reunidas en Numiswiki, que es una verdadera enciclopedia numismática, producto del esfuerzo de los miembros del foro, con más de 6000 artículos de alta calidad.

4 – Otros

Existen muchos otros foros (como numismáticos.org o foronum.com) que sin estar especializados cuentan con contenidos sobre numismática antigua, pero por lo general la cantidad y frecuencia de los artículos es mucho menor que en los mencionados.

¿Conocéis vosotros algún otro foro para recomendar?

martes, 5 de julio de 2011

Una buena introducción al coleccionismo de monedas antiguas

Ancient Coin Collecting (v. I)
Un lector me pide que le recomiende una buena introducción al coleccionismo de monedas antiguas en español. No es tarea fácil. De hecho, no conozco una introducción en nuestro idioma de publicación relativamente reciente. ¿Alguien conoce una? Un libro de tal tipo es una necesidad, pues creo que hay muchas personas a las que les gustaría empezar a coleccionar monedas griegas y romanas pero se sienten inseguros por falta de conocimiento y por no saber de qué forma obtener un panorama general del campo. Yo por lo menos tengo algunos amigos en esa situación.

La bibliografía numismática en nuestro idioma es escasa en todos los temas y los textos introductorios no son la excepción. Quien busque una guía práctica para iniciarse en el coleccionismo de monedas antiguas deberá recurrir al primer volumen de la serie Ancient Coin Collecting, de Wayne G. Sayles, en inglés.

Wayne G. Sayles es un oficial retirado de la fuerza aérea norteamericana que completó su formación universitaria como historiador del arte especializado en monedas antiguas. Hoy en día es uno de los especialistas numismáticos más famosos del mundo gracias a publicaciones como Ancient Coin Collecting o Classical Deceptions. Fundó en 1986 la revista mensual Celator, una de las más prestigiosas en el ámbito de la divulgación numismática en todo el mundo y también la Ancient Coins Collectors Guild, de la que es Director ejecutivo. Cuenta con una larga experiencia como comerciantes de moneda, actualmente con la firma Sayles & Lavender y mantiene también un blog numismático.

El libro de Sayles es un verdadero bestseller que se encuentra ya en su segunda edición. Ofrece un panorama general de todos los temas centrales con los que el coleccionista novel tiene que empezar a familiarizarse

No puede, por supuesto, esperarse de este pequeño volumen más que una somera presentación de algunos temas complejos. Su introducción a las diferentes culturas productoras de monedas en la Antigüedad, por ejemplo, no es más que un paseo a vuelo de pájaro. Pero para profundizar en este tema están los cinco restantes volúmenes de la serie Ancient Coin Collecting en que Sayles se ocupa de cada una de las culturas y períodos con más detalle (incluyo la lista al final de esta entrada). El resto del libro ofrece resúmenes de gran calidad de todo lo que el coleccionista debe saber. Especialmente logrados me parecen sus capítulos sobre el mercado numismático y sobre la identificación y atribución de monedas.

El principal problema para el lector de habla hispana es que el libro está claramente escrito con un público norteamericano en mente, por lo que algunos de sus consejos no le resultarán útiles. Un claro ejemplo son las referencias a los eventos numismáticos norteamericanos o los consejos para ahorrar impuestos a la hora de vender una colección de monedas. Las referencias bibliográficas que Sayles proporciona, además, están en su gran mayoría en inglés y no son fáciles de adquirir en países de habla hispana.

La serie Ancient Coin Collecting

viernes, 1 de julio de 2011

El doble sestercio de Decio – Un experimento fracasado en la lucha contra la inflación





La inflación y la crisis del siglo III


El Imperio Romano se vio sometido durante el siglo III a una profunda crisis que sacudió sus fundamentos políticos, militares y económicos. En este último plano, una de las señales más visibles de la crisis fue una fuerte inflación producto del continuado deterioro en la calidad de la moneda, es decir, en su contenido metálico. Las permanentes guerras significaban una carga enorme para el fisco, en una época en la que no existían mecanismos de financiamiento para cubrir el déficit del Estado. La única alternativa era disminuir el contenido en metal precioso o el tamaño de cada pieza para poder producir más monedas con la misma cantidad de metal.

Todas las denominaciones del sistema monetario romano se vieron afectadas por este proceso y, entre ellas, también el sestercio, cuyo tamaño y calidad se deterioró fuertemente durante el siglo III. Una respuesta frecuente a este problema por parte de los emperadores fue introducir nuevos tipos de moneda con un valor nominal más alto que las precedentes.




El doble sestercio de Trajano Decio


Uno de los diversos experimentos monetarios para responder a la inflación fue el “doble-sestercio” introducido por Trajano Decio durante su breve reinado (249-251). Era una moneda de gran tamaño (aproximadamente unos 38 gr. de peso) hecha de oricalco (la aleación también conocida con el nombre de latón). En realidad, la nueva moneda era poco más grande que los sestercios tradicionales del Alto Imperio, pero no fue un éxito.

Los sestercios dobles de Trajano son monedas impresionantes y si bien no convencieron a los contemporáneos son muy codiciados por los coleccionistas modernos. Ejemplares bien conservados alcanzan valores muy altos. Las imágenes que acompañan esta entrada ilustran a la perfección la gran calidad técnica con que Decio hizo producir la nueva moneda, se trata de verdaderas obras maestras. Su gran superficie permite a los grabadores explayarse en los detalles de los majestuosos retratos del emperador y su esposa, que reproducen un estilo clásico y de gran calidad. Lo mismo sucede con los motivos de reverso, con representaciones de, entre otras divinidades, Victoria, Felicitas y Pudicitia. Las leyendas apuntan a exaltar los tradicionales valores y la confianza en la invulnerabilidad de Roma.


Un fracaso similar al de esta moneda acompañaría, de hecho, a todas las iniciativas políticas relevantes de Decio, como su intento de erradicar el cada vez más difundido cristianismo con una dura persecución o el de expulsar las bandas de godos que habían penetrado en el territorio del imperio. Decio moriría, junto con su hijo, luchando contra los godos en la batalla de Abrito. Sería el primer emperador en perder la vida de esa forma, pero no el último.

El sestercio doble cayó pronto en desuso, pero fue revivido por el emperador gálico Póstumo (259-268). Póstumo hizo acuñar su propia versión del doble-sestercio, a menudo tomando sestercios antiguos y sobre-acuñándolos, probablemente debido a la escasez de metal. Los sestercios dobles desaparecerían junto con el imperio gálico y el mismo sestercio sería pronto suprimido del sistema monetario romano, siendo los últimos acuñados en nombre de Aureliano.