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miércoles, 4 de septiembre de 2019

¿Qué emperador hizo acuñar este magnífico sestercio en honor al divino Augusto y a Pietas?



Durante los reinados de los emperadores julio-claudios, en los dos primeros tercios del siglo I d.C., el arte numismático romano alcanzó un pico de excepcional calidad, visible sobre todo en los sestercios acuñados durante el período. La pieza cuya imagen encabeza esta entrada es un claro ejemplo de ello, con sus elaboradas escenas de anverso y reverso.

Para responder a la pregunta, este sestercio fue acuñado en el reinado de Calígula, probablemente entre los años 39-40 d.C., para conmemorar un evento específico de los primeros meses de su reinado, la inauguración del templo dedicado al emperador Augusto por el senado tras su muerte en el 14 d.C., cuando fue oficialmente reconocido como un dios.


El templo del divino Augusto


El templo fue construido entre las colinas de los montes Palatino y Capitolino, en el sitio de la casa que Augusto había habitado antes de iniciar su carrera política. El sitio no ha sido excavado y sólo tenemos una idea de la apariencia del templo por su representación en monedas como esta. Sabemos también que fue reconstruido por Domiciano y por Antonino Pío, y que siguió en uso hasta el siglo III d.C.

La construcción del templo fue lenta y se extendió durante todo el reinado de Tiberio, al punto de que este emperador falleció unos meses antes de la dedicación. Ésta se celebró en agosto del 37 d.C., el mes renombrado en honor de Augusto. Calígula, como Póntifice Máximo, tuvo la responsabilidad de dirigir las ceremonias y realizar los sacrificios rituales. Era una excelente oportunidad para que el nuevo soberano se pusiera en escena ante los ojos de los habitantes de Roma, resaltando su conexión familiar con Augusto, su bisabuelo materno. Se alude directamente a esta conexión en la leyenda del anverso.

Según el historiador Dión Casio (59.7.4), los festejos organizados por Calígula para marcar el evento fueron excepcionalmente extravagantes: se llevó a cabo una carrera de caballos de dos días y se organizó un gran espectáculo de combates que incluyó la matanza de 400 osos y de muchas otras bestias salvajes.


El sestercio de Calígula


Un par de años después de las ceremonias descritas, Calígula hizo acuñar en la ceca de Roma este exquisito sestercio cuyo reverso hace referencia al momento en que él mismo ofició uno de los sacrificios rituales, en este caso, el de un toro. El emperador aparece de pie junto a un pequeño altar con la cabeza velada y con una patera en su mano, mientras dos asistentes acercan el toro. Detrás puede verse el frente del templo de Augusto. El grabador del cuño se ha esforzado por mostrar la estructura y la decoración del edificio con cierto detalle. Seis columnas sostienen el arquitrabe, del que cuelgan guirnaldas. El friso contiene cinco figuras, la más grande, la del medio, podría identificarse probablemente como Marte. En la parte superior del techo, el artista ha colocado una cuadriga en posición frontal, acompañada de victorias aladas y otras figuras. La escena es flanqueada por la leyenda DIV AVG y por las convencionales letras SC.

En anverso, encontramos una leyenda que expone la titulatura imperial y la conexión de Calígula con su bisabuelo Augusto: CAESAR • DIVI • AVG(usti) • PRON(EPOS) • AVG(ustus) • P(ontifex) • M(aximus) • TR(ibunicia) • P(otestate) • III • P(ater) • P(atriae). En lugar del habitual busto imperial encontramos una figura velada y drapeada de la diosa Pietas, sentada hacia la izquierda, identificada fuera de toda duda por su nombre ubicado en el exergo. La diosa sostiene una patera y apoya el brazo sobre una pequeña figura. El grabador se esfuerza aquí por representar de manera realista los pliegues de su ropa, lo que logra con gran éxito.

En líneas generales, el estilo de las escenas es escultural y sigue los elevados estándares iconográficos habituales del período de la dinastía julio-claudia. El resultado es una obra maestra, cuya calidad puede compararse con la de las mejores producciones artísticas de su época.

domingo, 9 de diciembre de 2018

Las monedas de Alejandro Severo con el coliseo

áureo de Alejandro Severo- Coliseo
Áureo de Alejandro Severo con representación del Coliseo en su reverso - 222 - 223 d.C.


El coliseo fuera de servicio


Si hay un edificio que en el imaginario moderno simboliza la grandeza del Imperio Romano, sin duda, este es el coliseo. Por ello su imagen es uno de los motivos más buscados en todo tipo de souvenirs por los turistas que visitan la ciudad eterna.

El coliseo ya tenía una importancia semejante es sus años de gloria, cuando era la pieza central del sistema de entretenimiento de la población de Roma. Por eso, cuando en el año 217 d.C., durante el breve reinado de un emperador llamado Macrino, el edificio fue golpeado por un rayo y sufrió un incendio que lo dejó fuera de servicio, la situación podía desencadenar una crisis política.

Los trabajos de reconstrucción fueron iniciados durante el reinado de Heliogábalo (el sucesor de Macrino) pero fue sólo en el de Alejandro Severo (para los años 222-223 d.C.) que los mismos habían avanzado lo suficiente como para que el edificio volviera a utilizarse para entretener a los habitantes de la capital.


Una serie de monedas conmemorando la reapertura


La reapertura del Coliseo era un logro del que cualquier emperador podía presumir. Con fines propagandísticos se acuñó entonces una serie de monedas representando al coliseo en funcionamiento.


Medallón de Bronce - Alejandro Severo - Coliseo
Sestercio o Medallón de Alejandro Severo con representación del Coliseo en su reverso - 222 - 223 d.C.

Debe haber sido una emisión pequeña, sólo destinada a los habitantes de Roma, pues muy pocos ejemplares han llegado hasta nosotros. Sólo se conocen dos áureos y unos pocos sestercios, que algunos autores consideran más propiamente como medallones por su rareza.

En ambos tipos de acuñaciones vemos al coliseo representado con gran lujo de detalle.

En el áureo los tres primeros pisos tienen arcadas con estatuas. El cuarto tiene sólo ventanas y de él se elevan los soportes de los toldos que protegían a los espectadores del sol. A la izquierda se ve también un altar con una estatua, y a la derecha una columna, que representa quizás el templo de Júpiter Víctor.


sestercio de Alejandro Severo con el coliseo

En los medallones, la representación tiene algunas pequeñas diferencias. No hay estatuas en las arcadas inferiores del coliseo. A la izquierda del coliseo puede verse, además, a la meta sudans, y al emperador realizando un sacrificio, motivos que no aparecen en los áureos, mientras que a la derecha se reconoce otro edificio además del templo de Júpiter Víctor.

Por su gran rareza e interés, estás monedas alcanzan valores muy elevados cada vez que una de ellas llega a subasta, lo que no sucede con frecuencia.

jueves, 20 de septiembre de 2018

Tabla básica para identificar monedas del Imperio Romano

Tamaño relativo de las monedas del Imperio Romano
La entrada de hoy está orientada a aquellos que recién están comenzando con las monedas romanas y quieren comenzar a familiarizarse con las distintas denominaciones del período.

Una de las primeras cosas que el principiante debe aprender, es a identificar los tipos de monedas más comunes. Teniendo en cuenta algunas características específicas, es muy fácil distinguir las denominaciones más importantes del Imperio Romano. Por supuesto, los romanos introducirían variaciones en sus monedas a lo largo del tiempo y varias reformas cambiarían los pesos teóricos de las diversas piezas, como así también la pureza de sus aleaciones. Ello hace imposible hacer una tabla exacta que permita una identificación exacta a partir sólo del peso y el diámetro de una pieza. Lo mismo puede decirse de los tipos de retratos usados en los anversos y de los tipos de reverso, que son muy variables. A pesar de que algunos tipos específicos son los más comunes en una denominación, siempre hay excepciones.

La siguiente tabla sintetiza la información básica. Los tamaños relativos de las distintas denominaciones pueden compararse con facilidad en la imagen que encabeza esta entrada.

El fin de la misma es, insisto, ante todo didáctico, para facilitar al que se inicia dar los primeros pasos en el tema hasta adquirir por la práctica la capacidad de identificar rápidamente y sin duda, primero las denominaciones, y luego los períodos y los emperadores y motivos representados.

Denomiación     
Peso
Diámetro
Metal
Anverso
Reverso
Áureo
aprox. 6,5 - 8,0 gr.
aprox. 20mm
oro
Emperador laureado o con la cabeza   descubierta. También miembros de la familia imperial.
motivos variados
Sólido
Aprox. 4,5 gr.
Aprox. 20mm
Oro
El motivo más   frecuente es el busto del emperador hacia la derecha con diadema, coraza y manto.
Otro motivo común es el busto frontal del emperador con yelmo y coraza, que se vuelve predominante desde el reino de Arcadio.
Motivos variados
Denario
aprox. 2,3 - 4,0 G
aprox. 18mm
Plata
Emperador laureado o con la cabeza   descubierta. También miembros de la familia imperial.
motivos variados
Sestercio
aprox. 15 - 28g
aprox. 30-34 mm
Latón o bronce
Emperador laureado o con la cabeza   descubierta. También miembros de la familia imperial.
Incluye en la mayoría de los casos las letras S C, aunque no siempre
Dupondio
aprox. 5 - 14 g
aprox. 29mm
Latón
Generalmente Emperador con corona de rayos (es norma uniforme desde el reinado de Vespasiano). También miembros de la familia imperial. Algunos dupondios tempranos muy famosos no presentan retrato
Incluye en la mayoría de los casos las letras S C, aunque no siempre
As
aprox. 5 - 14 g
aprox. 27mm
aleación de cobre
Emperador laureado o con la cabeza   descubierta.
Incluye en la mayoría de los casos las letras S C, aunque no siempre
Antoniniano
Es introducido con un peso de entre 5,3 y 4,5 g pero decae con el tiempo
Aprox. 21mm, con tendencia a la reducción con el paso del tiempo
Aleación con cantidad cada vez menor de plata hasta llegar a un vellón bajo con contenido insignificante de la misma
Busto del emperador con corona de rayos. También miembros de la familia imperial.
Motivos variados
Siliqua
Introducida con un peso de 3,4 g., pronto baja
Aprox. 18mm.
Plata
El motivo más   frecuente es el busto del emperador hacia la derecha con diadema, coraza y manto.
Motivos variados
Follis
Introducida con un peso de entre 10 y 12 g que pronto declina
Aprox. 26mm.
Vellón bajo
El motivo más frecuente es el busto de los emperadores con corona de laureles y coraza y/o manto.
Motivos variados
AE 1, 2, 3 y 4
Peso variable
Se las clasifica por su diámetro de la siguiente manera:
AE1 = más de 25 mm; AE2 = 21-25 mm; AE3   = 17-21 mm; AE4 = menos de 17 mm
Vellón bajo
Retrato del emperador
Motivos variados

miércoles, 19 de septiembre de 2018

Un fantástico sestercio de Vespasiano celebrando la paz al comienzo de su reinado

Sestercio de Vespasiano, Roma 71 d.C. Anverso: IMP CAES VESPASIAN AVG P M TR P P P COS III Busto laureado de Vespasiano hacia la derecha. Reverso: SPES AVGVSTA S C Spes de pie entrega una a tres soldados. RIC 206.


La primera guerra judía y la llegada de Vespasiano al trono


Los últimos años del reinado de Nerón, el Imperio Romano se vio afectado por un número creciente de problemas. Dificultades fiscales llevaron a un fuerte incremento de impuestos para los habitantes de las provincias. La suba fue recibida con amplio descontento en todas partes, pero en la provincia de Judea, donde ya existía una situación de conflicto por tensiones étnicas y religiosas, fue la gota que rebalsó el vaso y dio origen a una revuelta abierta contra el poder romano.

Las legiones romanas fueron movilizadas para sofocar la protesta y Nerón confió a Vespasiano la dirección de las operaciones. Lo eligió, probablemente, pensando que, como era un hombre nuevo sin antepasados distinguidos en su familia, no se vería tentado de aspirar al trono. Sin embargo, Vespasiano terminaría ascendiendo al rango imperial tras la serie de cruentas guerras civiles que seguiría a la muerte de Nerón en lo que se conoce como “el año de los cuatro emperadores” (68-69 d.C.).

La lucha por el trono romano demoraría las operaciones en Judea, pero en el año 70 d.C. finalmente la ciudad de Judea, el principal foco de resistencia, sería tomada tras un largo asedio y marcaría a comienzos del reinado de Vespasiano un hito que el nuevo soberano se encargaría de publicitar en la famosa serie de monedas “Judea Capta”

Según el historiador de origen judío Flavio Josefo, que fue testigo de los hechos, la captura de Jerusalén fue extremadamente violenta y corrieron ríos de sangre por la ciudad a medida que los legionarios avanzaban por sus calles.

Captura de Jerusalén - 70 d.C.

El sestercio de Vespasiano RIC 206


El sestercio cuya imagen encabeza esta entrada forma parte de una serie más reducida abocada a destacar ya no el triunfo mismo sobre los judíos, sino el comienzo de una nueva era de paz que seguiría a la supresión de la revuelta.

En el reverso encontramos una escena militar muy original para lo que son las tradiciones de representación en la numismática romana. Vemos allí a la diosa Spes (la esperanza) que entrega una flor a un grupo de tres soldados romanos. Se trata de una forma original de representar la idea de que se esperaba el comienzo de una era de paz

La moneda se acuñó en el 71 d. C. Desafortunadamente, ese año representó sólo una pausa en la guerra, y las esperanzas representadas en este sestercio no se materializarían, ya que los romanos todavía se enfrentaban a grupos judíos que seguían resistiendo a pesar de que su lucha no tenía ninguna perspectiva de éxito. El último foco de resistencia fue aplastado sólo con la captura de Masada en el año 73 d.C.

lunes, 27 de agosto de 2018

Las hermosas monedas de Domiciano sobre los juegos seculares

Sestercio de Domiciano. 88 d.C. Reverso. Escena de entrega de ofrendas en el marco de los juegos seculares. Domiciano sentado en la plataforma baja con la inscripción FRVG AG, sosteniendo patera, frente a dos ciudadanos sosteniendo sus pateras; templo detrás. Leyenda: COS XIIII LVD SAEC A POP S C

Los juegos


En el año 88 d.C., el emperador romano Domiciano organizó la celebración de los juegos seculares (ludi saeculares), un tradicional festival religioso que implicaba diversos rituales y ceremonias que eran acompañados por espectáculos teatrales y juegos del circo. En teoría los ludi indicaban el final de un saeculum, un período de tiempo que podía interpretarse de diversas maneras como implicando 100 o 110 años, o la duración máxima de una vida humana.

Augusto había celebrado los ludi en el 17 a.C., transformando la ceremonia en un hito para señalar el comienzo de una era de paz y prosperidad bajo su gobierno. Claudio los celebró nuevamente en el 47 d.C. para conmemorar el 800° aniversario de la fundación de Roma. Domiciano los celebró en el 88 teniendo en cuenta el plazo de tiempo transcurrido desde la celebración de los juegos de Augusto, desechando considerar a los juegos de Claudio como un precedente.

Áureo de Domiciano 88 d.C. Anverso: Busto laureado del emperador hacia la derecha. Leyenda: DOMITIANVS AVGVSTVS GERMANICVS. Reverso: Heraldo de los juegos seculares (ludio) avanzando hacia la izquierza sosteniendo bastón y escudo. Leyenda: COS XIIII LVD SAEC FEC.


Un serie de monedas alusivas


En paralelo al evento, la ceca de Roma emitió una serie especial de monedas con reversos alusivos a los ludi y sus principales rituales en todas las denominaciones, que interrumpió la repetición de los tipos habituales que se habían acuñado y se seguirían acuñando durante todo el reinado de Domiciano, centrados en torno a Minerva, Fortuna, Virtus, etc. Los reversos vienen acompañados de la leyenda LVD(os) SAEC(ulares) FEC(it) en diversas variantes (RIC 2, 595-628).

Una serie tan amplia de tipos de reverso en referencia a un acontecimiento contemporáneo era una novedad sin precedentes en la tradición monetaria romana que merece especial atención. Se trata de un total de 15 tipos de reverso divididos entre áureos, denarios, un quinario de plata, sestercios, dupondios y asses.

Algunos de los reversos más importantes de la serie de monedas acuñadas por Domiciano en referencia a los juegos seculares, que muestran al emperador interactuando con los ciudadanos de Roma en los diferentes rituales llevados a cabo durante los ludi.


Como ha demostrado M. Grunow Sobocinski, los reversos alusivos a los ludi componen un programa completo destinado a cubrir múltiples aspectos de la celebración con tipos diferentes orientados probablemente a audiencias específicas. En su opinión, las imágenes de cada denominación parecen tener su propio tema general y tipo arquitectónico.

El oro y la plata repiten la iconografía usada por Augusto en sus monedas para ilustrar sus propios Ludi Saeculares: el cippus y el ludio. Estos tipos simbólicos estaban dirigidos a una audiencia de los sectores más acomodados, los únicos que tal vez estuvieran en condiciones de decodificar la referencia a las monedas de Augusto.

Dupondio de Domiciano 88 d.C. Reverso: Heraldo sosteniendo escudo y bastón, de pie a la izquierda de columna inscripta LVD SAEC FEC; quemador de incienso a la derecha. Leyenda: COS XIIII LVD SAEC FEC S C.


Todos los tipos narrativos, por el contrario, están acuñados en bronce. Los sestertii muestran principalmente al emperador interactuando con los ciudadanos de Roma, generalmente frente a un templo de fachada y flanco de estilo tetragonal. Las monedas de bronce más pequeñas, los dupondios y los asses, por su parte, representan al emperador sacrificando a los dioses en nombre del pueblo romano. Grunow Sobocinsky señala acertadamente que estas monedas narrativas enfatizan el papel del emperador como líder y sumo sacerdote de los romanos.

Referencias


Melanie Grunow Sobocinski ,”Visualizing Ceremony: The Design and Audience of the Ludi Saeculares Coinage of Domitian”, American Journal of Archaeology, Vol. 110, No. 4 (Oct., 2006), pp. 581-602.

domingo, 1 de julio de 2018

¿Cuánto vale un sestercio con el Coliseo?




Los sestercios de Tito y Domiciano con una vista a vuelo de pájaro del Coliseo romano colmado de espectadores se encuentran, sin duda, entre las monedas más atractivas e interesantes acuñadas durante el Imperio Romano. La imagen del conocido anfiteatro que todavía hoy es uno de los principales emblemas de la ciudad eterna es un imán que atrae la atención tanto del coleccionista como del público en general. Verla y desearla parecen ser lo mismo.


Como se trata de piezas que fueron acuñadas en emisiones relativamente reducidas por breves períodos de tiempo, muy pocos ejemplares han llegado hasta nosotros. De hecho, menos de 50. Además, la mayoría de ellos se encuentra ya desde hace mucho en las colecciones de algunos de los principales museos y gabinetes numismáticos del mundo. Los pocos que quedan en manos de coleccionistas privados aparecen ofrecidos en las subastas más importantes y son siempre noticia, por su atractivo histórico y también por las grandes sumas que deben desembolsar los afortunados compradores.



El ejemplar cuya imagen encabeza esta entrada, por ejemplo, fue subastado en febrero de 2017 por 470.000 dólares! Su valor se explica porque es uno de los mejor conservados que existen. Un ejemplar con mayor desgaste ilustrado sobre este párrafo alcanzó unos 100.000 dólares en mayo de 2017. Es claro que estos sestercios están fuera del alcance de la gran mayoría de los coleccionistas.


Una alternativa atractiva para quienes no disponen de esas cifras para destinar a sus colecciones son los paduanos, sestercios de fantasía producidos en el renacimiento justamente para aquellos coleccionistas de la época que no obtenían un original. El ejemplar sobre este párrafo es uno de los más bellos con una representación coliseo y fue subastado por 900 dólares. Para quienes eso también parezca demasiado es posible conseguir replicas modernas de diversa calidad por muy poco dinero.

He escrito más sobre los sestercios con el coliseo es estas entradas





También sobre los paduanos




viernes, 8 de junio de 2018

Roma sobre las siete colinas en un sestercio de Vespasiano



Durante el período comprendido entre los reinados de Calígula y la guerra civil del 68-69 d.C., los sestercios de la ceca de Roma alcanzan un excepcional nivel artístico. En mi opinión, durante el reinado de Vespasiano vemos tipos de reverso que ya no alcanzan la excepcional calidad del período precedente. Sin embargo, encontramos algunos reversos de gran originalidad e interés histórico que merecen una especial atención. Uno de los más notables es el que se encuentra ilustrado sobre estas líneas, el reverso de Dea Roma sentada sobre las siete colinas.

Dea Roma, la representación divina de la ciudad, era un motivo habitual de las monedas romanas de sus orígenes. Este tipo de reverso, sin embargo, la muestra de una forma sumamente original que incluye en una sola escena los atributos históricos y geográficos más destacados de la capital imperial.

En el centro de la escena vemos a Dea Roma reclinando cómodamente su espalda sobre las proverbiales siete colinas de la ciudad. Un brazo sostiene su cabeza y el otro una espada en su vaina (en algunos textos aparece descrita como un cetro). A la derecha vemos al dios del río Tíber y a su izquierda a la loba amamantando a Rómulo y Remo. Acuñada a comienzos del reinado de Vespasiano en el 71 d.C., el mensaje que pretende transmitirse con esta moneda parece claro, Roma renace tras el caos de las guerras civiles y una vez más alcanza, con Vespasiano, una grandeza digna de su historia.

Por su contenido emblemático, este reverso despierta un enorme interés entre los coleccionistas. Cabe destacar que se trata de un tipo extremadamente raro del que se conoce un único cuño. El ejemplar ilustrado es uno de los mejores que existen y formó parte de la exquisita colección Luc Girard. Fue subastado en 2010 por 19.000 francos suizos.